En la fotografía digital moderna, uno de los recursos más populares para agilizar la edición es el uso de presets o ajustes preestablecidos. Estas configuraciones prediseñadas permiten aplicar rápidamente efectos y ajustes a una foto con solo un clic. Pero, como toda herramienta poderosa, los presets deben usarse con conciencia para no caer en los errores comunes que pueden arruinar la estética de una imagen.
En este artículo, te explicamos qué son los presets, cómo usarlos correctamente y cómo puedes hacer que trabajen a tu favor para crear un estilo fotográfico propio.
¿Qué Son los Presets?
Los presets son conjuntos de ajustes predefinidos que modifican automáticamente parámetros como el brillo, el contraste, la saturación, la exposición, la temperatura de color, entre otros. Están diseñados para aplicar rápidamente un estilo específico a una fotografía, ya sea para lograr un efecto vintage, un contraste dramático o una apariencia cinematográfica.
Aunque pueden parecer simples filtros, los presets no son lo mismo que los filtros de redes sociales. Los presets son ajustes más completos y personalizados, creados para cambiar los elementos clave de la foto de manera más precisa.
¿Cómo Funcionan los Presets?
Los presets funcionan aplicando una serie de cambios a una foto en los parámetros básicos de edición. Pueden cambiar:
- Exposición y contraste: Ajustes que afectan la luz general de la imagen y la diferencia entre las luces y sombras.
- Temperatura de color: Modifica los tonos fríos o cálidos.
- Saturación y vibrancia: Aumenta o disminuye la intensidad de los colores.
- Curvas: Modifica el brillo y contraste en diferentes zonas tonales.
- HSL (Hue, Saturation, Luminance): Cambia los colores de manera específica, por ejemplo, haciendo el cielo más azul sin afectar el resto de la foto.
Los presets son fáciles de aplicar, pero el verdadero poder de esta herramienta radica en el ajuste fino que se puede hacer una vez que el preset ha sido aplicado.
¿Por Qué Usar Presets?
- Ahorro de tiempo: Los presets permiten aplicar una edición completa a varias fotos en minutos, lo que es especialmente útil cuando tienes un gran volumen de imágenes, como en una sesión de fotos o un evento.
- Consistencia: Si eres fotógrafo de eventos o trabajas con un cliente, los presets aseguran que todas las fotos tengan un estilo visual coherente.
- Accesibilidad: No todos tienen habilidades avanzadas en edición. Los presets permiten a los principiantes obtener resultados profesionales sin mucha experiencia.
- Estilo personal: Con el tiempo, puedes crear o modificar tus propios presets para darle a tus fotos una firma visual única.
¿Cómo Usar los Presets de Forma Responsable?
Aunque los presets pueden ser increíblemente útiles, es fácil caer en la tentación de usarlos sin pensar. Aquí te dejamos algunas recomendaciones para usar los presets de manera efectiva y con responsabilidad:
1. Ajusta los Presets Según Cada Foto
No todas las fotos son iguales. Incluso si el preset funciona bien en una imagen, puede que no se vea bien en otra. Ajusta siempre los parámetros después de aplicar el preset para adaptarlo a las condiciones específicas de la foto, como la luz, el sujeto y el entorno.
Por ejemplo:
- Si una foto está sobreexpuesta, disminuye la exposición después de aplicar el preset.
- Si el color se ve demasiado saturado, ajusta la saturación.
2. No Te Bases Solo en los Presets
Un buen preset puede hacer mucho, pero no debe ser el único recurso en tu flujo de trabajo. La clave de una buena edición es complementar el preset con ajustes personalizados. Combina la rapidez del preset con ajustes finos y toques de creatividad para que la imagen se vea natural y bien equilibrada.
3. No Exageres con los Efectos
Uno de los errores más comunes con los presets es aplicarlos con demasiada intensidad. Algunos presets, como los de estilo vintage o cinematográfico, pueden dar a las fotos un aspecto muy dramático. Asegúrate de no sobrecargar la imagen con efectos que desvirtúan su aspecto natural.
💡 Consejo: Después de aplicar el preset, verifica si la foto sigue transmitiendo la sensación que querías y haz ajustes según sea necesario.
4. Usa Presets de Alta Calidad
Los presets baratos o mal diseñados pueden dañar tus fotos más que mejorarlas. Asegúrate de usar presets creados por fotógrafos profesionales o marcas confiables que ofrezcan configuraciones bien equilibradas.
Cómo Crear Tus Propios Presets
Si ya tienes algo de experiencia en edición, te puede interesar crear tus propios presets para tener un control total sobre tu estilo visual. Aquí te explicamos cómo hacerlo:
- Edita una Foto: Comienza editando una foto que te guste, aplicando todos los ajustes que consideres adecuados para lograr el estilo que buscas.
- Guarda los Ajustes: Una vez que estés satisfecho con la edición, guarda los ajustes como un preset. En Lightroom, puedes hacer esto fácilmente desde el panel de “Desarrollar”, seleccionando “Crear Preset”.
- Aplica y Ajusta: Aplica tu nuevo preset a otras fotos. No olvides realizar ajustes adicionales para asegurar que el preset funcione bien en diferentes condiciones de luz y escena.
¿Cuáles Son los Mejores Presets para Empezar?
Si eres nuevo en el uso de presets, te recomendamos comenzar con algunos paquetes gratuitos o de bajo costo que ofrecen resultados sutiles y profesionales. Algunos de los mejores presets para fotógrafos principiantes incluyen:
- Preset de blanco y negro: Para darle un toque clásico y atemporal a tus fotos.
- Preset de luz suave: Ideal para retratos y fotos al atardecer.
- Preset vintage: Para un estilo nostálgico y cálido.
- Preset de alto contraste: Perfecto para paisajes o fotos de arquitectura.
Conclusión
Los presets son una excelente herramienta para mejorar tus fotos rápidamente y conseguir resultados profesionales sin tener que ser un experto en edición. Sin embargo, como con todas las herramientas, es importante usarlos con responsabilidad y asegurarte de que se adapten bien a cada imagen. Con práctica y paciencia, los presets pueden ayudarte a crear un estilo único que haga que tus fotos resalten en cualquier plataforma.